
Reflexión Actitudinal
La aptitud o "facultad" (del latín aptus = capaz para), en psicología, es cualquier característica psicológica que permite pronosticar diferencias inter-individuales en situaciones futuras de aprendizaje. Carácter o conjunto de condiciones que hacen a una persona especialmente idónea para una función determinada.
La actitud es la forma de actuar de una persona, el comportamiento que emplea un individuo para hacer las cosas. En este sentido, se puede decir que es su forma de ser o el comportamiento de actuar, también puede considerarse como cierta forma de motivación social de carácter, por tanto, secundario, frente a la motivación biológica, de tipo primario que impulsa y orienta la acción hacia determinados objetivos y metas. Eiser define la actitud de la siguiente forma: predisposición aprendida a responder de un modo consistente a un objeto social.
Si nuestra actitud es negativa ante una situación, se pone en marcha el funcionamiento “reactivo” activando el modo lucha, huida y bloqueo provocando estrés que a su vez libera la hormona esteroidea cortisol. Si por el contrario nuestra actitud es positiva, el funcionamiento que se activa es creativo inibiendo el miedo y el bloqueo. Muchos entrenadores a sus jugadores les recomienda que visualicen la escena de éxito y de este modo ayudarles a que no se bloqueen.
¿Cómo es su actitud? Piense en un listado de 5 acciones para mejorarla.